FESTIVIDAD DEL CORPUS CHRISTI EN VILLARGORDO
El Corpus Christi es la fiesta religiosa en honor del Santísimo Sacramento. En esta solemnidad del Cuerpo y de la Sangre del Señor se ofrece a la piedad de los fieles, el culto de tan gran Sacramento, para que adoren la presencia de Cristo el Señor en la Eucaristía, para que celebren las maravillas de Dios y para que aprendan a vivir más intensamente la Eucaristía.
Por eso este 18 de Junio, Villargordo "se ha puesto de largo" para recibir la festividad del Corpus Christi y como cada año ha engalanado sus calles para acoger el paso del Santísimo Cuerpo y la Sangre de Cristo por las calles.
La noche previa a la procesión, los vecinos de las calles por donde discurrirá el desfile procesional con la Custodia, las decoran con mucho mimo y cariño, con preciosos altares, llenos de plantas y adornos, lo que supone un espectáculo excepcional que sólo se ve durante este día del año.
El Domingo ha amanecido con un sol que se hacía notar desde las primeras horas de la mañana. Se ha comenzado con la Santa Misa, donde nuestro párroco, D. José Mª ha señalado en su homilía “….. que es una fiesta en la que fundamentalmente lo que se celebra es la Eucaristía. La presencia real del Señor en la eucaristía donde debemos meditar la profundidad del amor del Señor que se ha quedado oculto bajo las especies sacrament
ales. Así como el Jueves Santo celebramos la institución de la Eucaristía, el día del Corpus Christi celebramos la presencia real del Señor entre nosotros con su cuerpo y con su sangre, demostrándonos así, su gran amor por todos nosotros. No sólo debemos acercarnos a participar del gran banquete que es la Eucaristía sino que debemos acompañar este acto con buenas obras”.
A continuación un grupo de costaleros de la Cofradía de Ntra. Sra. de los Dolores, portó con gran recogimiento y majestuosidad las andas donde se encontraba expuesta la Custodia con el Santísimo Cuerpo y la Sangre de Cristo, y que ha sido acompañado por un numeroso número de fieles, una representación de cada una de las cofradías de pasión y gloria, así como los niños de primera comunión que han sido los encargados de abrir el cortejo.
La fiesta del Corpus Christi fue instituida por Urbano IV en 1264. En la bula “Transitururs de hoc mundo” se establecía que el jueves después de la octava de Pentecostés, es decir el jueves después de la fiesta de la Santísima Trinidad. Aunque al establecer la fiesta no se hablaba de procesión, pronto el pueblo fiel vio la necesidad de coronar la fiesta con una procesión con la Eucaristía.
Esta es la “procesión”, que como representación de la “Iglesia en salida” que busca que Dios recorra nuestras calles y entre en nuestra vida “Es bueno no olvidar que la liturgia es culto a Dios. Lo fundamental es el Señor, Él es el protagonista”.
